DIPLOMADO “COMPETENCIAS DOCENTES EN EL NIVEL MEDIO SUPERIOR”
Actividad de aprendizaje 13: Actividades de aprendizaje y de evaluación de los aprendizajes.
Octavio Metelín Zarrazaga
Propósito: Identificar elementos teórico-metodológicos para diseñar procesos integrales de evaluación, calificación y acreditación de una asignatura, que faciliten su toma de decisiones en el proceso evaluativo de aprendizaje.
El enfoque basado en competencias exige a los docentes una amplia concepción de la educación, por lo tanto todo el proceso de evaluación debe centrarse en propiciar en los estudiantes el desarrollo de competencias genéricas y disciplinares.
Además requiere de un conjunto de criterios que deben de estar alienados con los objetivos que pretende alcanzar la asignatura y en el caso de Matemáticas I, dichos objetivos son: Resolver problemas aritméticos y algebraicos, realizar transformaciones algebraicas, resolver ecuaciones lineales con una, dos y tres incógnitas así como resolver ecuaciones de segundo grado con una incógnita, en un ambiente de tolerancia y respeto.
Para evaluar el proceso de enseñanza y aprendizaje se aplicarán las 3 clases de evaluación que se distinguen por el momento en que son aplicadas: Evaluación diagnóstica, Evaluación formativa y Evaluación sumativa.
La evaluación diagnóstica inicial se aplicará al comienzo del ciclo escolar y servirá para investigar los aprendizajes previos del alumno con relación a los contenidos del curso. A este tipo de evaluación no se le asigna calificación.
La evaluación formativa se aplicará en forma continua y su finalidad será regular el proceso de enseñanza y aprendizaje. Servirá para corregir posibles errores del estudiante y verificar sus avances, rectificar las estrategias didácticas del profesor y fomentar la autoevaluación del estudiante. A este tipo de evaluación sí se le asigna calificación y los criterios que serán empleados y su ponderación serán establecidos por la Academia de Matemáticas del Plantel 2. El profesor deberá dar a conocer dichos criterios y ponderación a los alumnos desde el inicio del curso.
También se considerarán las tres modalidades de la evaluación formativa: la regulación interactiva, la regulación retroactiva (la Academia de Matemáticas del plantel 2 establece en su plan de trabajo que se designen horas semanales de asesoría para los alumnos con dificultades en su proceso de aprendizaje) y la regulación proactiva (también establece la Academia de Matemáticas que se den asesorías a los alumnos con un alto nivel de aprendizaje en habilidades matemáticas, para prepararlos para concursos de conocimientos a nivel estatal, regional y en las Olimpiadas de Matemáticas de la UJAT, etc.).
Se proponen las siguientes técnicas e instrumentos de evaluación en Matemáticas I:
- Para una Evaluación informal: Observación de las actividades realizadas por los alumnos por medio de una lista de control y la exploración por medio de preguntas formuladas por el profesor durante la clase.
- Para una Evaluación semiformal: Portafolio de evidencias y trabajos que se realicen dentro y fuera de clases.
- Para una Evaluación formal: Pruebas objetivas no estandarizadas, lista de control o verificación, rúbrica, evaluación de desempeño, cuestionarios y mapas conceptuales.
La evaluación formativa a su vez, dará lugar a la Evaluación formadora, la cual considera como tipos de evaluaciones alternativas y complementarias a las del docente a la autoevaluación, a la coevaluación y a la evaluación mutua, las cuales se aplicarán de acuerdo a las actividades de enseñanza y aprendizaje utilizadas.
En lo que respecta a la Evaluación sumativa o final, se realizará al término de cada período correspondiente a examen parcial y también al finalizar el ciclo educativo. La Dirección General del COBATAB establece para todos los planteles pertenecientes a este subsistema 2 períodos de exámenes parciales y uno de examen final, considerando como calificaciones aprobatorias del 6 al 10 y como reprobatorias del 0 al 5.
Para la acreditación de la asignatura, se calcula el promedio de las calificaciones obtenidas en los dos parciales, y esa calificación se promedia con la del examen final. Se promedian estos dos datos y el resultado es la calificación definitiva. Por lo tanto, la evaluación sumativa proporcionará resultados al final del proceso y permitirá la toma de decisiones, tanto para calificar al alumno en cada período de evaluación parcial como para acreditarlo o no, al finalizar el curso de Matemáticas I.
Finalmente, la evaluación integral estará acompañada de los instrumentos de evaluación. En este caso, es factible que el profesor desarrolle sus propias prácticas de evaluación como un medio de innovación, siempre y cuando se ajusten a los objetivos de aprendizajes, sin embargo puede recurrir a los diversos formatos ya probados tomando en cuenta el contexto donde se aplicará. Si los formatos de evaluación cumplen con los objetivos, seguramente esto traerá cosas buenas para el proceso, pero si no cumplen con los objetivos de aprendizaje, es seguro que traerá como consecuencia que los estudiantes se estimulen para utilizar niveles superficiales de aprendizajes. La práctica de la evaluación de los aprendizajes, aunque compete fundamentalmente a los profesores y estudiantes, es importante que las administraciones de los centros educativos modifiquen sus prácticas administrativas de registro y control que sean afines y congruentes con el sistema de evaluación implementada por los profesores.
Octavio Metelín Zarrazaga
OMZ_Ac13
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